Debido al elevado número de intervenciones que se practican en España, ingresar en un quirófano para mejorar la imagen corporal podría considerarse una intervención de rutina. Pero nada más alejado de la realidad. Se trata de un tipo de intervenciones en lasque una acertada elección del profesional y una sincera autoevaluación sobre los motivos que llevan a tomar la decisión es absolutamente clave para que este proceso culmine con éxito para paciente y cirujano.
Queremos hacer hincapié en que la información que se facilita al paciente es vital. Es primordial que el médico conozca cual es contenido de este derecho del paciente para llegar a un consentimiento de la intervención, y esto ocurre cuando le hemos explicado pormenorizadamente al paciente riesgos, resultados y consecuencias de esta intervención.
En la primera entrevista en consulta, el cirujano plástico debe saber descubrir aspectos psicológicos ocultos por el paciente y que puedan tener influencia en la buena evolución de una cirugía estética. Y antes de acudir a esta primera cita, el paciente debe hacer una labor de búsqueda de un médico experto porque aunque existan muchos que se postulen para estas cuestiones, sólo algunos son cirujanos plásticos capaces de efectuar la intervención con garantías.
Algunas de las recomendaciones que el paciente puede seguir si va a operarse son:
- Comprobar, en la consejería de Sanidad, que la clínica a la que acude está legalizada.
- Por si surgiera alguna complicación, asegurarse de que tiene UCI y equipo de reanimación para cualquier intervención.
- Consultar en la Sociedad de Cirugía Plástica Reparadora que el cirujano está especializado.
- Asegurarnos que nos atiende un especialista y no un comercial.
- Pedir un presupuesto cerrado y desglosado, conocer las posibles complicaciones, los cuidados posteriores, etc.
- Estudiar pormenorizadamente los detalles del consentimiento de intervención que firmemos y preguntar absolutamente todas las dudas que tengamos al respecto.
Por último no está de más recordar que aunque se trata de una intervención voluntaria, ya que de ella no depende su vida, esto no la hace menos importante, puesto que puede tener consecuencias muy graves para la salud física y psicológica del paciente.
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