El juzgado de Primera Instancia nº36 de Barcelona ha dictado una sentencia que obliga a indemnizar con 64.707,35 euros a la familia de una fallecida. La difunta era una anciana de 90 años que murió en el Hospital de Mataró tras no diagnosticarle a tiempo una hemorragia cerebral.
La mujer no había sido sometida a las pertinentes pruebas neurológicas y su tratamiento se había limitado a medidas paliativas. En una primera asistencia sanitaria en su domicilio el día 10 de julio de 2014, se le recetó únicamente paracetamol y antibióticos como respuesta a un diagnóstico de dolor cervical e infección de orina. Un día después, la mujer ingresó en el centro sanitario por mal estado general.
Pasadas 48 horas en el hospital y sin haberle detectado la afección neurológica, los médicos explican a los familiares que la anciana se encuentra en fase terminal y se procede a retirarle el tratamiento y aplicarle medidas paliativas.
La sentencia recoge la insistencia de la familia, el día 14 de julio, a reanudar el tratamiento médico. Finalmente, la doctora que la atendía decidió llevar a cabo las pruebas neurológicas que determinaron el diagnóstico de hemorragia cerebral el día 15.
Sin embargo, los días de retraso no permitieron que se pudiera realizar ningún tipo de tratamiento, ni la intervención quirúrgica que hubiera sido necesaria. La paciente falleció el día 18 del mismo mes.
En la sentencia, la magistrada considera que los síntomas iniciales eran suficientes para solicitar un examen neurológico más exhaustivo y la práctica de una prueba TAC, que habría revelado la existencia de una hemorragia cerebral y la posterior aplicación del tratamiento requerido.
Finalmente, la sentencia concluye que ha habido negligencia por parte de los profesionales médicos del Hospital de Mataró. La indemnización económica que deberá abonar la compañía Zurich como aseguradora del hospital, asciende a la cifra de 64.707,35 euros.
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